Uno de los mayores beneficios de trabajar con un sistema certificado, es tener la garantía de que ese sistema, ha sido probado y testeado por organismos certificadores del más alto nivel como por ejemplo el iTeC, cumpliendo todos los requisitos de la normativa española de la edificación. Este es el caso del sistema Thermochip que rebasa con creces los estándares de seguridad y habitabilidad.
Es por ello, que trabajar con sistemas o productos no certificados puede acarrear graves consecuencias, ya que aparte de los desperfectos que puedan surgir de los materiales no certificados empleados en la obra, como puede ser la condensación, generación de humedades o colapso de materiales; también se puede llegar a incurrir en otro tipo problemas, como por ejemplo los que atañen a la seguridad de las personas en caso de incendio.
El DAU es un certificado ideado para productos y sistemas innovadores, que no disponen de una norma de referencia, por ser productos nuevos.
Los certificados DAU aseguran la calidad de los productos, y es la opinión favorable que emite el ITeC sobre las prestaciones del sistema, teniendo en cuenta los criterios de proyecto y ejecución, y las soluciones constructivas.
El DAU recoge las prestaciones del sistema y sirve para demostrar y asegurar el cumplimiento de la reglamentación española (CTE) por parte de los productos y sistemas innovadores.
Los certificados DAU especifican el comportamiento del sistema en cuanto a sus prestaciones relativas a los diferentes documentos del CTE. Esto implica aspectos como:
Todas estas características referentes al cumplimiento de todos los apartados del código técnico son verificadas mediante ensayos en laboratorios como Afiti licof, TECNALIA, Applus, etc.
Además del cumplimiento CTE, el sistema completo de envolvente cuenta con certificado Passivhaus, que avala unas prestaciones energéticas superiores a la de normativa estándar.
Desde el punto de vista del proyectista utilizar un sistema con certificación DAU, te otorga certidumbre y garantías ya que incluye criterios de proyecto con los que poder prescribir adecuadamente el sistema. De esta manera el arquitecto tendrá la seguridad de estar usando un sistema que cumple con todos los requisitos de la normativa española (CTE).
Si eres el usuario final, las garantías que te ofrece un sistema certificado son el confort tanto acústico y término, como el de mantenimiento (durabilidad) y eficiencia energética.
Además, si eres un constructor, una certificación DAU, te aporta los criterios de ejecución ya que en este tipo de certificaciones se detalla cómo se ha de utilizar el sistema certificado para ejecutar la edificación.
Por todo ello, utilizar el sistema Thermochip con certificado DAU, ofrece garantías y certidumbre tanto al proyectista, como al constructor, promotor y usuario final, alcanzado las mayores cotas de calidad y confort.